sábado, 24 de noviembre de 2012

A la sombra de una vela

Era un eco, ese retorno, como la sombra de un sonido lejano que se colaba debajo de una puerta medio abierta. Melodías, arpegios,  escalas, un sinfín de sonidos seductores acompañaban a un intermitente movimiento de una sombra esbelta. Mis manos, lentamente y sin desconcierto se acercaron al compás de esa melodía escondida a la puerta entreabierta. Dentro todo oscuridad, menos una vela que rompía con un titubeante esplendor desde una estrecha mesa al fondo de la habitación. La música salia de todas partes, cada centímetro de esas paredes eran partícipes de su eco, metálico. La vela me llamó escandalosa con su cálida y su hipnotizadora danza, sin tener opción caminé despacio hacia ella hasta descubrir qué figura sombreaba la tierna luz de la maltrechada vela. Vi unos ojos, expectantes de mi inesperada visita, claros como la mar tropical, eternos, brillantes, cortantes y absorbentes .. escondían ese mundo donde el tiempo existe como parte solo de una curiosa casualidad, bañados a la vez de una cascada de oro que brollaba de sus dedos, entrecruzados con su pelo. Sus cabellos escondían las formas de su cuerpo, que desnudo en esa cama allí olvidada me hizo caer en sueño.
Quisieron mis dedos, recorrer con prisa las sibilantes formas de su vientre, los suaves tactos de su espalda, hubieran querido mis labios abrasar los entresijos de ese cuerpo, y querer su dulce olor al ritmo de ese piano acelerado! de esas notas brollando sin cesar! apagar el eco de esas altas paredes y hacer sombra con la luz de su cuerpo a la ambiciosa vela que como la luna llena, intentaba evitar que viera las estrellas! Besó mi cuello dulce, frenética, cercana; clavó sus dientes con nervio placer mordiéndome el hombro ajetreado y clavando su mirada entre mis ojos confusos. La vela se consume, y cuando el sol entra por la ventana ese sueño desaparece de nuevo. Hasta que la próxima vela se encienda sin avisar, esper siempre el ardor de esos ojos, el tacto aterciopelado de tu vientre y esos labios carnosos.

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